miércoles, 27 de enero de 2010

Secreto

Secreto, penumbra larga sobre los dedos. Las plumas caen, tus manos no dichas, tus manos en mi pecho y un collar de cisnes que nadan alrededor de tu cuello, ésta es la hora señalada, la hora cerrando la boca. Vas a caminar por toda mi sangre, vas a pisarme el aire. No digas nada. Hundíme en la mina de tu vientre, en la pura mentira de tenerte donde la espuma duerme. La dureza de piedras verdes. Hay sirenas de fruta muriendo en el sol, y un elemento alado se posa a leernos un salmo de bestias. Hay silencio. La vendimia de árboles rubios creciendo de golpe entre tus senos como una canción en llamas.




Yo lo siento.



Vendrás a buscarme en la noche,

perdida y oscura,



como un secreto gritado bajo la tierra.

jueves, 21 de enero de 2010

Dedicatoria

Calmáte, mirá bien
no mires tanto.

Yo sé qué vientos de asma son los que circulan
lado a lado de tu cama.


Escuchá una cosa,
escucháme un poco
mientras me lleno
la boca de cangrejos.


Todavía sos la pulpa azul que dentro de tu mano hierve,




la niña a la que el fuego le quitó el color de ojos.

miércoles, 13 de enero de 2010

sublimación

Quieto
voy esfumándome
en silencio.



Los árboles recorren en puntas de pié
distancias imperceptibles.


Desaparezco.


Desaparezco por saber cosas como ésta.


Busco un anillo de miel para cortejar la hierba,
una sílaba de fuego
cerca de la noche.


El sol es un estómago de lirios,
ríe como un padre.


El sol no escuchará mi rezo.

Virará aturdido en su círculo de bombas,
la tierra y su raíz de pólvora,
sus infinitos muertos fluorescentes.



Desaparezco, callado,
me deshago en silencio como se hacen de la nada las piedras
cuando nadie está mirando.



La noche transparente,
la noche un puro peso de fantasmas

recorre mi pelo,
me deja besos en la frente.


Desaparezco, lo sé.



En silencio y dormido y callado y torcido y con el corazón taponado
................................................................./ de plumas



desparezco.