martes, 20 de abril de 2010

Lo que quede de la tarde III

                                                                               A Lucía


De lejos


quisiera que fueras tres veranos menos,

la humareda de sangre sobre las sienes.



Hoy casi te necesito.


Una pantera de mármol se frota en silencio contra mi pierna,
yo ni siquiera canto.




Hay un vértigo lento en el borde de tu ausencia.




Un libro pinchado que riega mi cama de letras.




Y tus manos finas,


las velas que crecen por toda la luna.

7 comentarios:

Verónica Cento dijo...

Con cierto tinte nostálgico...

Muy bueno, Fede. Un abrazo.

Ezequiel dijo...

Cierto, transmite nostalgia, transmite.

Muy lindo poema!
Sdos.
Ezequiel
www.unarazonparavivir.com.ar

Anónimo dijo...

Recontra lésbico. ME ENCANTA!!

negro X dijo...

"un libro pinchado..." que imagen tremenda bianco jej me encanto, abrazo y nos debemos el tango.

Anónimo dijo...

cuando las letras forman palabras, no es tan simple, unirlas para conformar al que escribe, y explicar el suspiro que quiere reflejar.
hay cosas que son bellas, hay cosas que solo son.... supongo que un suspiro simplemente es, la expresion no verbal de lo bello; aquello qeu se siente solo si se escucha sin sonido.

Anónimo dijo...

te extraño

Anónimo dijo...

¿¿Sera de chusma che?? pero yo quiero saber quien extraña a quien... (no te hagas ilusiones nena que no es para vos....aunque tal vez si...jajajja)
ay que feo que es ser tan curiosa....chan!!