domingo, 21 de septiembre de 2008

( )

Es obvio que me voy a dormir sin tu pueblo de vidrio sobre la cama.

Lentamente giraré la manivela del ojo y ni un aserrín de luz se colará debajo
porque tu polvo de zorro cremado se esparce ahora por otra siesta
y te deja arena sobre la cama
mientras yo no consto.

Despaciosamente me pisaré los ojos
y un espacio de azúcar quemada contra la pierna
te hará evidente

en la oscura verticalidad del minuto

que parte al medio la noche.

6 comentarios:

Yugoslavija dijo...

no lo escribí yo.. algo así es como me siento.
just that.

no entiendo por qué la mala onda, de todas maneras

Yugoslavija dijo...

no, igualmente, lo de los nudillos no te va a cerrar a menos que leas el fragmento anterior donde habla sobre eso.
algo asi como, que el mundo de darle tantas palizas, quizás tenga los nudillos hinchados, y que, ahora iba a ser el quien iba a terminar con los nudillos rotos, por que pretendía hacerle frente, aunque al mundo no le iba a interesar en absoluto.
claro está, el mundo tiene nombre y apellido.

colorprimario dijo...

¿en la oscura verticalidad del minuto
que parte al medio la noche?

Pues sí: hermoso.

Me suena al instante preciso para el embrujo de la soledad.

Saludos, dos y mil.

Verónica Cento dijo...

Hola Fede.

Gracias por pasar por La escribiente diurna. Estuve leyendo algo de tu blog y me gustó mucho. Me permitís linkearte? Saludos.

Indalea dijo...

A vos te trajo la primavera.
Por estar floreciendo estás disculpado, sino ya hubiera tramado una macabra venganza.
Y yo? que qué cuento? las gotas de rocío, las vueltas que dan mis pajaritos, los días que pasaron hasta que se fue el frío...

araño, que eficaces tus redes eh!
see yaaa

J. dijo...

Parece casi que obvio que el minuto tenga que partir al medio la noche con tal descripción.

Lentamente giré mi ojo para leer a ese tal federico que aparece en apariciones amigas.

Un gusto de puño.
Saludos de arena.

Julia