Es obvio que me voy a dormir sin tu pueblo de vidrio sobre la cama.
Lentamente giraré la manivela del ojo y ni un aserrín de luz se colará debajo
porque tu polvo de zorro cremado se esparce ahora por otra siesta
y te deja arena sobre la cama
mientras yo no consto.
Despaciosamente me pisaré los ojos
y un espacio de azúcar quemada contra la pierna
te hará evidente
en la oscura verticalidad del minuto
que parte al medio la noche.
Escena diurna
Hace 14 años
6 comentarios:
no lo escribí yo.. algo así es como me siento.
just that.
no entiendo por qué la mala onda, de todas maneras
no, igualmente, lo de los nudillos no te va a cerrar a menos que leas el fragmento anterior donde habla sobre eso.
algo asi como, que el mundo de darle tantas palizas, quizás tenga los nudillos hinchados, y que, ahora iba a ser el quien iba a terminar con los nudillos rotos, por que pretendía hacerle frente, aunque al mundo no le iba a interesar en absoluto.
claro está, el mundo tiene nombre y apellido.
¿en la oscura verticalidad del minuto
que parte al medio la noche?
Pues sí: hermoso.
Me suena al instante preciso para el embrujo de la soledad.
Saludos, dos y mil.
Hola Fede.
Gracias por pasar por La escribiente diurna. Estuve leyendo algo de tu blog y me gustó mucho. Me permitís linkearte? Saludos.
A vos te trajo la primavera.
Por estar floreciendo estás disculpado, sino ya hubiera tramado una macabra venganza.
Y yo? que qué cuento? las gotas de rocío, las vueltas que dan mis pajaritos, los días que pasaron hasta que se fue el frío...
araño, que eficaces tus redes eh!
see yaaa
Parece casi que obvio que el minuto tenga que partir al medio la noche con tal descripción.
Lentamente giré mi ojo para leer a ese tal federico que aparece en apariciones amigas.
Un gusto de puño.
Saludos de arena.
Julia
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